Transcurridas 4 fechas del torneo más difícil del mundo, es posible hacer algunas proyecciones:
1.- Scudetto: los aspirantes son 4: Inter, Milan, Roma y Palermo, en orden de posibilidades.
La historia marca que en Italia resulta ganador el equipo con la valla menos vencida (Milan, 1 gol en contra) y no el equipo más goleador (Palermo con 11, Inter y Roma con 9). Pero desde que el Milan partió con 8 puntos de desventaja, podría producirse una excepción esta vez.
Con todo, no puede descuidarse el hecho de que en Octubre se conocerá el fallo de segunda instancia del caso Moggiopoli, con lo que la penalización de 8 puntos al Milan podría verse reducida, aumentando sus expectativas de vencer. Tampoco debe olvidarse que el año pasado, el rossonero le sacó 12 puntos de ventaja al Inter, así es que descontar 8 puntos no es una tarea imposible, máxime considerando la irregularidad neriazzurra, que ha visto peligrar dos triunfos holgados (Fiorentina y Chievo Verona) y que rivales de mayor talla no le hubiesen perdonado.
Roma tiene un buen equipo, con un 11 ideal a la altura de los grandes de Europa, mas el banco es demasiado corto y deberá priorizar: o realizar una decente Champions League o pelear por el Scudetto.
Palermo es un rival muy fuerte en Sicilia y cuenta con un Di Michelle en estado de gracia. De todas formas, es un equipo poco acostumbrado a pelear arriba y al parecer, ya sufrió el primer mareo en las alturas y terminó perdiendo ante el modesto Empoli.
2.- Descenso: de momento, la Fiorentina parece jugar demasiado presionada por descontar los 19 puntos de penalización con que partió. Ello le hace afrontar los partidos de manera apresurada, como queriendo llegar a cero rápidamente. Es comprensible, pero deben entender que la temporada es muy larga y el castigo podría reducirse, y además cuentan con un equipo muy competitivo y con el goleador del año pasado, Luca Toni.
La penalización que cae sobre la Reggina también la hace seria candidata.
Fuera de estos casos, los equipos más débiles aparecen en la forma de Torino y Ascoli, dos de los recien ascendidos.
Un margen de mejora tienen -conociendo sus planteles- el Parma y el Chievo.
3.- Sorpresas: La gran forma del Messina se debe en buena parte al excelente momento por el que atraviesa Nicolás Córdova: el chileno sufrió una transformación posicional similar a la de Pizarro, acomodándose como doble cinco y armando el juego desde el círculo central.
Udinese mezcla experiencia en la delantera - Iaquinta y Di Natale- con juventud en la medular, muy rápida y dinámica -Asamoah, Obodo, Muntari-, que le está dando frutos.
Similar fórmula la de Lazio, que presenta un equipo en formación -Makinwa, Foggia, Ledesma (fundamental en la manija)-, ayudado por otros con mucha experiencia -Peruzzi, Oddo, Rocchi, Tare, Pandev-.
4.- Goleador: Hernán Crespo (Inter, 3 tantos) se presenta como el máximo candidato a ser el capocannonieri, por su buen momento y por el equipo en el que juega, que seguramente será el más goleador de la liga.
Gilardino (Milan, 0 goles) aún no ha presentado sus credenciales esta temporada, aquejado por una lesión, aunque se sabe que de 20 goles no baja, más aún considerando que ahora no vivirá bajo la sombra de Shevchenko. Tiene todo para destaparse.
Ojo con Bianchi (Reggina, 4 goles), quien puede ser la revelación del torneo y con Vucinic (Roma, 0 goles), lesionado y que aún no debuta con la giallorossi, pero que dará que hablar, como ya lo hizo en Lecce.
5.- Primer técnico en caer: me la juego que será Zaccheroni, DT del Torino, un equipo recien ascendido, pero que es un grande, y que se reforzó adecuadamente (gastó más de 14 millones de doláres), pese a lo cual los resultados no han sido positivos. A su favor "Zac" tiene el haber asumido un día antes del inicio del torneo (reemplazando a De Blasi), por lo que se le debe dar un tiempo de maniobra, mas el presidente del club exige resultados inmediatos.
Atención también con la banca de la Fiorentina, que está muy caliente: Prandelli es un gran técnico, pero le tocó bailar con la más fea. Descontar esos 19 puntos es más una tarea sicológica que futbolística, y al parecer la presión está mermando demasiado al equipo.
1.- Scudetto: los aspirantes son 4: Inter, Milan, Roma y Palermo, en orden de posibilidades.
La historia marca que en Italia resulta ganador el equipo con la valla menos vencida (Milan, 1 gol en contra) y no el equipo más goleador (Palermo con 11, Inter y Roma con 9). Pero desde que el Milan partió con 8 puntos de desventaja, podría producirse una excepción esta vez.
Con todo, no puede descuidarse el hecho de que en Octubre se conocerá el fallo de segunda instancia del caso Moggiopoli, con lo que la penalización de 8 puntos al Milan podría verse reducida, aumentando sus expectativas de vencer. Tampoco debe olvidarse que el año pasado, el rossonero le sacó 12 puntos de ventaja al Inter, así es que descontar 8 puntos no es una tarea imposible, máxime considerando la irregularidad neriazzurra, que ha visto peligrar dos triunfos holgados (Fiorentina y Chievo Verona) y que rivales de mayor talla no le hubiesen perdonado.
Roma tiene un buen equipo, con un 11 ideal a la altura de los grandes de Europa, mas el banco es demasiado corto y deberá priorizar: o realizar una decente Champions League o pelear por el Scudetto.
Palermo es un rival muy fuerte en Sicilia y cuenta con un Di Michelle en estado de gracia. De todas formas, es un equipo poco acostumbrado a pelear arriba y al parecer, ya sufrió el primer mareo en las alturas y terminó perdiendo ante el modesto Empoli.
2.- Descenso: de momento, la Fiorentina parece jugar demasiado presionada por descontar los 19 puntos de penalización con que partió. Ello le hace afrontar los partidos de manera apresurada, como queriendo llegar a cero rápidamente. Es comprensible, pero deben entender que la temporada es muy larga y el castigo podría reducirse, y además cuentan con un equipo muy competitivo y con el goleador del año pasado, Luca Toni.
La penalización que cae sobre la Reggina también la hace seria candidata.
Fuera de estos casos, los equipos más débiles aparecen en la forma de Torino y Ascoli, dos de los recien ascendidos.
Un margen de mejora tienen -conociendo sus planteles- el Parma y el Chievo.
3.- Sorpresas: La gran forma del Messina se debe en buena parte al excelente momento por el que atraviesa Nicolás Córdova: el chileno sufrió una transformación posicional similar a la de Pizarro, acomodándose como doble cinco y armando el juego desde el círculo central.
Udinese mezcla experiencia en la delantera - Iaquinta y Di Natale- con juventud en la medular, muy rápida y dinámica -Asamoah, Obodo, Muntari-, que le está dando frutos.
Similar fórmula la de Lazio, que presenta un equipo en formación -Makinwa, Foggia, Ledesma (fundamental en la manija)-, ayudado por otros con mucha experiencia -Peruzzi, Oddo, Rocchi, Tare, Pandev-.
4.- Goleador: Hernán Crespo (Inter, 3 tantos) se presenta como el máximo candidato a ser el capocannonieri, por su buen momento y por el equipo en el que juega, que seguramente será el más goleador de la liga.
Gilardino (Milan, 0 goles) aún no ha presentado sus credenciales esta temporada, aquejado por una lesión, aunque se sabe que de 20 goles no baja, más aún considerando que ahora no vivirá bajo la sombra de Shevchenko. Tiene todo para destaparse.
Ojo con Bianchi (Reggina, 4 goles), quien puede ser la revelación del torneo y con Vucinic (Roma, 0 goles), lesionado y que aún no debuta con la giallorossi, pero que dará que hablar, como ya lo hizo en Lecce.
5.- Primer técnico en caer: me la juego que será Zaccheroni, DT del Torino, un equipo recien ascendido, pero que es un grande, y que se reforzó adecuadamente (gastó más de 14 millones de doláres), pese a lo cual los resultados no han sido positivos. A su favor "Zac" tiene el haber asumido un día antes del inicio del torneo (reemplazando a De Blasi), por lo que se le debe dar un tiempo de maniobra, mas el presidente del club exige resultados inmediatos.
Atención también con la banca de la Fiorentina, que está muy caliente: Prandelli es un gran técnico, pero le tocó bailar con la más fea. Descontar esos 19 puntos es más una tarea sicológica que futbolística, y al parecer la presión está mermando demasiado al equipo.
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