Sin grandes sorpresas se definieron las cuatro llaves de cuartos de final del Clausura ’08, instancia que no sólo determinó a los candidatos al título sino que también dio inicio a la danza de nombres y enroques para suceder a los técnicos cesados producto de las tempraneras eliminaciones de las universidades.
Basta decir que de los 4 técnicos semifinalistas sólo Barticciotto parece seguro en su cargo para el próximo año, pues Oscar del Solar presentó su renuncia -con recule- y tanto Musrri como Figueroa se han candidateado tanto como les ha sido posible y con maneras que rayan en lo denigrante para ocupar el lugar que dejó Salah.
En jornada sabatina, Palestino dio cuenta por 2-1 de un O’Higgins muy timorato, distinto al que en lo personal me esperaba. El opaco nivel de Beausejour fue tan evidente que un jugador de similares características pero menor nivel como Da Silva causó estragos cuando decidió jugarse la personal.
Luego, en el Monumental se vivió un partidazo entre Colo Colo y Huachipato.
El local se puso rápidamente en ventaja tras gol de Gazale y se propició muchas jugadas de peligro en el primer tiempo, por lo que el empate obra de Rebolledo (problema insoluble para Carrasco) en las postrimerías del mismo fue un castigo excesivo.
En el complemento, Barrios cayó tras un penalcito de Veloso. Con todo, el artillero sólo pudo batir en segunda instancia al buen meta huachipatino. Minutos más tarde, el propio Barrios estiró las cifras tras conectar un centro de Torres.
Lo que vino después fue una polémica que sólo sirvió para ponerle más condimento a un duelo táctico muy rico. Barrios chocó con Veloso y ambos quedaron tendidos, pero Rebolledo se mandó en ofensiva y primereando a Carrasco, se inventó un penal.
En el área colocolina se armó una musaraña que no pasó a mayores, salvo por la decisión salomónica de expulsar a Cereceda y Monje. A priori, Colo Colo ganaba con el “cambio” (un lateral por el goleador del otro equipo), pero si Gamadiel convertía el penal podía empinar demasiado las cosas para los albos. Sin embargo, el hombre de la usina tiene su mote no mal ganado de “pecho frío” y mandó la pelota a la Garra Blanca. 3-1 se mantenía el marcador.
Pero a 10 del final, Cortés, tras gran jugada personal de Currimilla, estrechó los guarismos y puso el suspenso. Un gol más clasificaba a la usina.
Fue entonces cuando asomó la figura imponente de Sanhueza para enfriar el partido y servir un balón que Figueroa conectó mal pero igual, gracias a la mala ubicación del portero rival, logró colarse entre el primer palo y el meta. 4-2 final.
El domingo, Rangers sufrió pero hizo valer su localía y los tres goles obtenidos como visita para sellar la llave a su favor.
Lepe incurrió en algunas contradicciones vitales que le costaron la serie y con seguridad, el puesto.
No tiene nada de malo jugarse por los juveniles y declararlo públicamente, pero si en el 11 inicial están tipos como Ibarrola en vez de Toloza o Núñez, el asunto claramente no es de principios, sino de gustos personales. Lo peor es que ambos jugadores ingresaron en el transcurso del partido, lo que demuestra que a todo ese empuje que el símbolo cruzado pretende imprimir a sus equipos debe necesariamente agregarle una cuota de convicción en sus dirigidos que no ha podido transmitir, debido a sus decisiones contradictorias.
Del Solar, por otra parte, aprovechó los casi 40 grados de temperatura, las dimensiones reducidas de la cancha y el pasto muy largo para trabar el juego y buscar el desgaste físico del rival, desesperado por saber que entraba obligado a conseguir un gol. Y la estrategia le dio resultados, al punto tal de que uno que no se cansa nunca, como Gary Medel, dio muestras evidentes de cansancio y tuvo que salir sobre el final del partido.
El empate 1-1 (Sarabia por Rangers y M. González por la UC) fue un resultado justo pero tampoco habría sido escandaloso el triunfo local, ya que Oroz erró un penal y el empate de la franja se produjo cuando se acababa el partido.
Por la tarde, la U nuevamente evidenció sus graves carencias de carácter ya que luego de encender la ilusión con un gol tempranero de Montillo se dejó empatar absurdamente tras cartón (González), abortando cualquier esperanza. Pese a ello, logró ponerse por delante en el marcador tras gol de Salas e irse al descanso en ventaja, pero nuevamente ¿desconcentraciones? le permitieron a Mannara empatar apenas reiniciado el complemento. La U estaba peor que al principio, pues debía marcar 4 goles en 45 minutos.
Ya sin chances de clasificar, los azules se volcaron en darle una despedida digna a Salas, quien volvió a convertir. Probablemente, el tanto que forjó el 3-2 final haya sido su último gol con los colores universitarios, luego de una segunda etapa marcada por más duras que maduras.
Para la anécdota: al término del partido, Salah fue a despedir y a felicitar a su par loíno, Figueroa, quien simuló un gesto de reconocimiento. Digo simuló porque en paralelo su representante se encontraba ofreciéndole sus servicios al gerente azul, Johnny Ashwell. Patético.
Las parejas de semifinales serán Cobreloa - Colo Colo -la que seguramente será la final anticipada- y Palestino – Rangers, los underdogs de los playoffs.
En septiembre se vienen dos paradas durísimas, primero ante un Brasil en zona de repechaje y hambriento de puntos y luego contra Colombia, único invicto y rival directo, partidos en los que habría que sacar al menos cuatro unidades.
