Concluyo mi entrega de los animadores del Apertura chileno 2007 con cuatro equipos que, si bien tienen escasas posibilidades de campeonar, serán los rivales bisagras que quiénes aspiran verdaderamente al título deberán saber vencer.
EVERTON: el cuadro oro y cielo fue la vedette del mercado de pases, ya que practicamente conformó un plantel partiendo de cero.
El ambicioso proyecto de la nueva dirigencia pretende, en un mediano plazo, colocar a Everton dentro de los 5 equipos más grandes de Chile, al menos en términos económicos. Basta recordar que para este campeonato, los viñamarinos poseen la tercera plantilla más cara del fútbol chileno, sólo superada por Colo Colo y Cobreloa.
En su esfuerzo, la dirigencia ruletera no escatimó en números ni en nombres: contrató a Juvenal Olmos -quien adquirió nuevos bríos luego de su triunfo en un programa de baile- y a los ex seleccionados Herrera y Martel.
Everton juega así:
(3-4-1-2): Herrera; Guidi, Menghini, Raín; Martel, Rubilar (Reyes), López, Ribera; Núñez (Uribe); Urbano, Olea.
La última línea presenta puntos altos, como Guidi y Raín, y si bien han sufrido 6 goles en cuatro partidos, debe considerarse que es una defensa absolutamente nueva, por lo que obviamente falta fiato.
Al medio, Olmos para un doble cinco muy marcado, ya que sus externos prácticamente no sienten la marca, sobretodo en el caso de Martel, delantero devenido en extremo.
De Ribera, en lo personal, esperaba mucho más. En su defensa, puede decirse que no es su posición, pero debe acostumbrarse a que Olmos suele privilegiar su idea y su esquema por sobre los ejecutantes.
En la ofensiva, este equipo presenta a Olea, un 9 neto, rebotero y peleador, acompañado desde más atrás por Núñez o Uribe. Urbano cumple la tarea de segunda punta.
Como ya se ha dicho, este es un equipo completamente nuevo, por lo que este torneo será de acople y rodaje, y aunque no comparto en lo absoluto su idea futbolística, de seguro el equipo de Olmos hará pasar malos ratos a los demás candidatos cuando le toque recibirlos en Viña.
O'HIGGINS: El equipo de "Peineta" -que fue vapuleado por Cobreloa- se hace muy fuerte en casa, donde va camino a las 20 partidos como invicto.
Pese a que perdió piezas fundamentales como Guidi y Olea, sumó buenos elementos en la forma
de Alcázar, Flores, Aceval y Rojas.
El celeste forma de la siguiente manera:
(3-4-1-2) Barra; Rojas, Gómez, Aceval; Rodríguez (Meneses), Flores Manzor, Ramírez, Diez; González; Maldonado, Alcázar.
Cabe destacar que jugando en calidad de visita, el esquema varía a un 4-4-2 o un 4-4-1-1, ingresando Olate a la última línea.
En mi opinión, es precisamente ése el punto débil del cuadro de la Sexta Región: fuera de casa se transforma en un equipo irregular, que intenta buscar un resultado y termina pasando papelones como el vivido esta fecha ante Cobreloa (5-0 para los loínos).
Garcés debe asumir definitivamente el hecho que maneja un equipo con buenos jugadores -en su lenguaje: no maneja un Mercedes, pero tampoco un triciclo- y dejarse de culpar al árbitro por sus derrotas.
Si O'Higgins desea ser el "grande de provincias" y dar el salto de calidad, debe asumir que cuando sea visita también tiene la obligación de ser protagonista.
Y es que en lo estrictamente futbolístico, este equipo cuenta con varios jugadores de bastante nivel e incluso algunos "seleccionables": Barra es un arquerazo; Gómez viene de ser titular en el Sudamericano Sub-20 con Chile; Rodríguez es de los tres mejores laterales derechos del medio; Diez fue seleccionado de divisiones inferiores argentinas; Alcázar fue campeón de América con el Once Caldas; Maldonado es seleccionado venezolano.
En fin, O'Higgins debe optar entre seguir siendo un cuadro imbatible en casa pero frágil fuera de ella -lo que significa hacer buenos torneos, pero nada más- o atreverse decididamente y pelear el Campeonato. Pero en serio.
UNIÓN ESPAÑOLA: Después de un oscuro segundo semestre en el 2006, los hispanos buscan retomar el protagonismo propio de su rica historia.
El "Negro" Pinto fue el DT elegido para encabezar la transición desde lo poco que queda de aquél célebre Campeón del Apertura 2005, hacia el futuro de una institución que espera seguir los pasos de Colo Colo en cuanto su modelo societario.
Los de Plaza Chacabuco forman así:
(4-3-1-2): Limenza; Ibarra, Acosta, Vergara, Riquelme; Bascuñán, Villagra, Fuentes; Sierra; Gutiérrez, Vidangossy.
El portero paraguayo sacó chapa de héroe cuando selló el ascenso de Lota Schwager a Primera División y ha refrendado con notables actuaciones en Unión Española su contratación; por contraparte, la última línea hispana deja mucho que desear, ya que la dupla de centrales no ofrece en absoluto garantía (Acosta metió 3 autogoles en dos partidos, increíble).
Bascuñán, buen jugador, colabora en la medular con Villagra, el único volante defensivo neto.
Por la izquierda, el interesante Johan Fuentes ayuda al incombustible José Luis Sierra en la creación, aportando remate de media distancia y dinámica.
La dupla ofensiva es rápida, encaradora y hábil, ideal para jugar de contra, aunque también puede variar con el ingreso de Gioíno, que aporta presencia.
Lo ya dicho: Unión es un equipo en transición, que cuenta con una última línea muy feble y seguramente eso le pasará la cuenta, pero sin duda realizará una mejor campaña que la del último torneo.
PUERTO MONTT: El equipo "más austral del mundo" lleva a cabo un proyecto institucional interesante, que el año pasado lo llevó a ser la sorpresa del Campeonato y que sabe hacerse fuerte de local, donde exprime al máximo el hecho de jugar en césped artificial.
Los de "Palito" Cavalleri juegan de la siguiente forma:
(3-4-1-2): Espinoza; Montecinos, Muñoz, Ruíz; Talma, Guajardo, Águila, Schwager; Cristián Muñoz; Álvarez, Ramírez.
El equipo "salmonero " hace del rigor y la lucha sus armas más potentes, para lo que cuenta con una última línea de gran envergadura física y un mediocampo que es todo "meter", con Guajardo a la cabeza.
Sus puntos altos están en el "Chilote" Águila, jugador interesantísimo que se desdobla en funciones de recuperación y se suma bien al ataque, y en el ala izquierda Schwager, que cumple su función perfectamente de clausurar la banda, aportando además desborde y buenos centros.
En la creación cuentan con uno como la "Nona" Muñoz, cuya calidad no se discute y que si no está en un grande es únicamente por su irregularidad.
En ofensiva se encuentra la línea más débil de este equipo: huérfanos de los paraguayos Giménez y Cantero, carecen de peso específico en el área rival, por lo que se acomodan más al juego de contragolpe, explotando los desbordes de sus laterales, los pelotazos de la "Nona" y la velocidad de Álvarez.
En definitiva, Puerto Montt es un equipo que aprovecha la ventaja comparativa que le otorga una superficie que domina, que juega bien de contragolpe y que se comporta como un cuadro compacto que hace del todo algo superior a la suma de las partes que lo conforman.
EVERTON: el cuadro oro y cielo fue la vedette del mercado de pases, ya que practicamente conformó un plantel partiendo de cero.
El ambicioso proyecto de la nueva dirigencia pretende, en un mediano plazo, colocar a Everton dentro de los 5 equipos más grandes de Chile, al menos en términos económicos. Basta recordar que para este campeonato, los viñamarinos poseen la tercera plantilla más cara del fútbol chileno, sólo superada por Colo Colo y Cobreloa.
En su esfuerzo, la dirigencia ruletera no escatimó en números ni en nombres: contrató a Juvenal Olmos -quien adquirió nuevos bríos luego de su triunfo en un programa de baile- y a los ex seleccionados Herrera y Martel.
Everton juega así:
(3-4-1-2): Herrera; Guidi, Menghini, Raín; Martel, Rubilar (Reyes), López, Ribera; Núñez (Uribe); Urbano, Olea.
La última línea presenta puntos altos, como Guidi y Raín, y si bien han sufrido 6 goles en cuatro partidos, debe considerarse que es una defensa absolutamente nueva, por lo que obviamente falta fiato.
Al medio, Olmos para un doble cinco muy marcado, ya que sus externos prácticamente no sienten la marca, sobretodo en el caso de Martel, delantero devenido en extremo.
De Ribera, en lo personal, esperaba mucho más. En su defensa, puede decirse que no es su posición, pero debe acostumbrarse a que Olmos suele privilegiar su idea y su esquema por sobre los ejecutantes.
En la ofensiva, este equipo presenta a Olea, un 9 neto, rebotero y peleador, acompañado desde más atrás por Núñez o Uribe. Urbano cumple la tarea de segunda punta.
Como ya se ha dicho, este es un equipo completamente nuevo, por lo que este torneo será de acople y rodaje, y aunque no comparto en lo absoluto su idea futbolística, de seguro el equipo de Olmos hará pasar malos ratos a los demás candidatos cuando le toque recibirlos en Viña.
O'HIGGINS: El equipo de "Peineta" -que fue vapuleado por Cobreloa- se hace muy fuerte en casa, donde va camino a las 20 partidos como invicto.
Pese a que perdió piezas fundamentales como Guidi y Olea, sumó buenos elementos en la forma
de Alcázar, Flores, Aceval y Rojas.
El celeste forma de la siguiente manera:
(3-4-1-2) Barra; Rojas, Gómez, Aceval; Rodríguez (Meneses), Flores Manzor, Ramírez, Diez; González; Maldonado, Alcázar.
Cabe destacar que jugando en calidad de visita, el esquema varía a un 4-4-2 o un 4-4-1-1, ingresando Olate a la última línea.
En mi opinión, es precisamente ése el punto débil del cuadro de la Sexta Región: fuera de casa se transforma en un equipo irregular, que intenta buscar un resultado y termina pasando papelones como el vivido esta fecha ante Cobreloa (5-0 para los loínos).
Garcés debe asumir definitivamente el hecho que maneja un equipo con buenos jugadores -en su lenguaje: no maneja un Mercedes, pero tampoco un triciclo- y dejarse de culpar al árbitro por sus derrotas.
Si O'Higgins desea ser el "grande de provincias" y dar el salto de calidad, debe asumir que cuando sea visita también tiene la obligación de ser protagonista.
Y es que en lo estrictamente futbolístico, este equipo cuenta con varios jugadores de bastante nivel e incluso algunos "seleccionables": Barra es un arquerazo; Gómez viene de ser titular en el Sudamericano Sub-20 con Chile; Rodríguez es de los tres mejores laterales derechos del medio; Diez fue seleccionado de divisiones inferiores argentinas; Alcázar fue campeón de América con el Once Caldas; Maldonado es seleccionado venezolano.
En fin, O'Higgins debe optar entre seguir siendo un cuadro imbatible en casa pero frágil fuera de ella -lo que significa hacer buenos torneos, pero nada más- o atreverse decididamente y pelear el Campeonato. Pero en serio.
UNIÓN ESPAÑOLA: Después de un oscuro segundo semestre en el 2006, los hispanos buscan retomar el protagonismo propio de su rica historia.
El "Negro" Pinto fue el DT elegido para encabezar la transición desde lo poco que queda de aquél célebre Campeón del Apertura 2005, hacia el futuro de una institución que espera seguir los pasos de Colo Colo en cuanto su modelo societario.
Los de Plaza Chacabuco forman así:
(4-3-1-2): Limenza; Ibarra, Acosta, Vergara, Riquelme; Bascuñán, Villagra, Fuentes; Sierra; Gutiérrez, Vidangossy.
El portero paraguayo sacó chapa de héroe cuando selló el ascenso de Lota Schwager a Primera División y ha refrendado con notables actuaciones en Unión Española su contratación; por contraparte, la última línea hispana deja mucho que desear, ya que la dupla de centrales no ofrece en absoluto garantía (Acosta metió 3 autogoles en dos partidos, increíble).
Bascuñán, buen jugador, colabora en la medular con Villagra, el único volante defensivo neto.
Por la izquierda, el interesante Johan Fuentes ayuda al incombustible José Luis Sierra en la creación, aportando remate de media distancia y dinámica.
La dupla ofensiva es rápida, encaradora y hábil, ideal para jugar de contra, aunque también puede variar con el ingreso de Gioíno, que aporta presencia.
Lo ya dicho: Unión es un equipo en transición, que cuenta con una última línea muy feble y seguramente eso le pasará la cuenta, pero sin duda realizará una mejor campaña que la del último torneo.
PUERTO MONTT: El equipo "más austral del mundo" lleva a cabo un proyecto institucional interesante, que el año pasado lo llevó a ser la sorpresa del Campeonato y que sabe hacerse fuerte de local, donde exprime al máximo el hecho de jugar en césped artificial.
Los de "Palito" Cavalleri juegan de la siguiente forma:
(3-4-1-2): Espinoza; Montecinos, Muñoz, Ruíz; Talma, Guajardo, Águila, Schwager; Cristián Muñoz; Álvarez, Ramírez.
El equipo "salmonero " hace del rigor y la lucha sus armas más potentes, para lo que cuenta con una última línea de gran envergadura física y un mediocampo que es todo "meter", con Guajardo a la cabeza.
Sus puntos altos están en el "Chilote" Águila, jugador interesantísimo que se desdobla en funciones de recuperación y se suma bien al ataque, y en el ala izquierda Schwager, que cumple su función perfectamente de clausurar la banda, aportando además desborde y buenos centros.
En la creación cuentan con uno como la "Nona" Muñoz, cuya calidad no se discute y que si no está en un grande es únicamente por su irregularidad.
En ofensiva se encuentra la línea más débil de este equipo: huérfanos de los paraguayos Giménez y Cantero, carecen de peso específico en el área rival, por lo que se acomodan más al juego de contragolpe, explotando los desbordes de sus laterales, los pelotazos de la "Nona" y la velocidad de Álvarez.
En definitiva, Puerto Montt es un equipo que aprovecha la ventaja comparativa que le otorga una superficie que domina, que juega bien de contragolpe y que se comporta como un cuadro compacto que hace del todo algo superior a la suma de las partes que lo conforman.
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