viernes, diciembre 08, 2006

LOS PROBLEMAS DE LA SERIE A

La Serie A italiana, catalogado por muchos como la liga más difícil del mundo, vive un triste presente y el futuro no es prometedor.

Son varias las razones que explican el retroceso de la liga italiana en el concierto europeo.
Al conocido escándalo de corrupción ocurrido el año pasado, se unen una serie de factores que hoy por hoy, la mantienen a bastante distancia de ligas como la española o inglesa, y casi a la par de otras históricamente menores, como la francesa, alemana o portuguesa.

En primer lugar, se pueden señalar cuestiones de infraestructura: los estadios de la Serie A, salvo el caso de San Siro, distan mucho de los modernos estadios de las demás ligas europeas. Ello se debe principalmente a que, desde el Mundial de Italia 90, no se han realizado eventos futbolísticos de gran magnitud en el país, cuestión que ha imposibilitado la inversión en recintos de mayor seguridad, cercanía con la cancha, comodidad, etc., situación que redunda en que la gente se haya alejado de los mismos, lo que se refleja este año en que el promedio de asistencia a los partidos de la máxima categoría italiana ha sido la más baja en 20 años.
Tambien influye en este aspecto, ciertamente, el descenso de Juventus a la Serie B, ya que si bien el equipo bianconero raramente llenaba su estadio, sí lo hacía cada vez que salía de Turín.
Además del caso de Juventus, la ausencia de otros equipos de gran convocatoria en la máxima divisón, como es el caso del Genoa, Bologna y Nápoles, ha contribuido a esta circunstancia.

En segundo lugar, hay que señalar la estricta política tributaria de Italia, situación que deja a la Serie A en desventaja frente a otros países, como España.
Este hecho se manifiesta en algunas cuestiones muy evidentes. Por ejemplo, en Italia pagar un sueldo líquido a un jugador de un millón de euros significa para la institución un gasto de 1,8 millones de la divisa. En cambio, en España, pagar la misma suma significa un gasto de "sólo" 1,3 millones.
Asimismo, en Italia existe un fuerte movimiento sindicalista y proteccionista, lo que se manifiesta en que, a modo de ejemplo, para que un jugador "extracomunitario" se considere "comunitario" (asimilado) deben pasar 10 años de permanencia en el país. En España, para que ocurra lo mismo, se requieren sólo 2 años de permanencia, bajo el módulo de la catergoría de jugadores "iberoamericanos", lo que facilita la llegada de jugadores de esta parte del Mundo, que bien sabemos son los que hacen gran parte del espectáculo.

En tercer lugar, están los derechos de televisión. Recientemente, el Real Madrid estremeció al Mundo entero con el anuncio de un contrato de televisón que le significaría un ingreso de 1,1 miles de millones de euros, válido por 7 años.
En Italia, por cuanto la institución de la "mutualidad" tiene gran presencia, el reparto de los dineros por concepto de venta de derechos de televisón se hace de la siguiente forma: 3/4 del producto de la venta van a parar a un fondo común, que se reparte de manera igual entre todos los clubes. El cuarto restante, se entrega a "prorrata", es decir, de acuerdo a la valorización que la cadena de televisón que se adjudica los derechos de la Lega Calcio realiza sobre cada uno de los clubes.
En Alemania, el fondo común es el 26%, mientras que en Inglaterra es de 43%. En Francia, en tanto, el fondo común asciende al 50%. En España, cada club negocia por separado los derechos televisivos, por lo que no existe fondo común: ello explica la abismal diferencia de presupuesto que existe entre Barcelona y Real Madrid versus el resto de los equipos "chicos", con excepción, en cierto modo, de Valencia y Atlético Madrid.
Para Galliani, Vicepresidente del Milan, la "centralización" de los derechos televisivos en Italia significará la "tumba de la Serie A".

En cuanto a este punto, debe hacerse una precisión: el probable efecto de la "centralización" pueda ser una Serie A mucho más equitativa y competitiva en lo interno, pero ciertamente los clubes "grandes" de Italia verán muy reducidas sus posibilidades de lograr títulos a nivel continental, ya que no podrán competir con los "grandes" de España, Inglaterra o Francia.
Es así como Galliani, al respecto señala que en la temporada 2000-01, el Milan facturaba más que el Barcelona y el Real Madrid. Hoy, ambos equipos superan al club rossonero.

Los efectos que ha traído el paulatino "empobrecimiento" de la Serie A son manifiestos: las grandes figuras ya no recalan en Italia, al contrario, son "arrebatados" por los clubes de otros países (Shevchenko es un claro ejemplo. Kaká podría ser el próximo); las jóvenes promesas latinoamericanas son rápidamente llevadas al Viejo Continente por equipos españoles, ya que aún estando "en verde", los montos que manejan son imposibles de igualar por los clubes italianos (piénsese en que Milan estaba interesado en Higuaín, pero ante la arremetida de Real Madrid, el club italiano desistió, porque simplemente "no podía competir"); se han abierto mercados poco explorados hasta hace poco, principalmente de jugadores provenientes de Europa Oriental y de Centroamerica, cuyo valor es bastante inferior al de los futbolistas latinoamericanos; y finalmente, como suma de todos los factores, la Serie A es muy poco difundida: hoy sólo puede seguírsele por la RAI.

En mi opinión, es lamentable todo lo que ocurre con la liga italiana. Según creo, la segunda potencia mundial del fútbol no merece vivir el oscuro panorama actual y el negro futuro que se avecina.
Lo digo como amante del fútbol, porque si bien la Premiership ofrece un espectáculo de lujo en cuanto a organización, estadios, asistencia, jugadores, me parece que no aporta nada al desarrollo del "deporte más hermoso del mundo" en cuanto a táctica, técnica, estrategia, etc.: todos los equipos juegan absolutamente igual, y si bien el ritmo es vertiginoso, el espectáculo futbolísticio estrictamente hablando -lo que ocurre dentro de la cancha- deja bastante que desear.
La Liga (española), por su parte, aporta bastante en cuanto a riqueza técnica y figuras, pero fuera del espectáculo que brindan los grandes equipos, ver un partido entre clubes de medianía de tabla hacia abajo, es realmente desagradable y aburrido.
La liga francesa, por su parte, se ha nutrido básicamente de jugadores africanos, lo que redunda en un juego mucho más físico y veloz, pero que -Lyon aparte-, no aporta gran cosa al espectador.

La Serie A, en cambio, y pese a cargar siempre con el estigma del "catenaccio" se caracteriza (o caracterizaba) por mezclar la estrategia con la técnica individual, la innovación táctica (desde lo que en su tiempo fue el "catenaccio" mismo, pasando por la revolución introducida por Sacchi a fines de los 80 y principios de los 90, hasta el juego sin delanteros patentado por la Roma actual de Spalletti) con el clasicismo de los sistemas, la pasión latina con el rigor europeo y el virtuosismo del ataque con las férreas defensas (de allí que se pensara que aquél que lograba ser goleador en la liga italiana, fácilmente podía superar su performance en cualquier otra parte).

Hoy por hoy, el gran atractivo de jugar en Italia son los propios jugadores italianos identificados con sus colores (Maldini en el Milan, Totti en la Roma, Del Piero en Juventus, etc.) que refutan ofertas desde el exterior por convertirse en "banderas", así como el indesmentible "plus" que significa participar en la liga del Campeón del Mundo, y la forma en cómo se vive el fútbol en dicho país (el caso de Hernán Crespo es decidor al respecto).

La única solución que se me ocurre para evitar la extrapolación que podría sufrir el fútbol europeo entre clubes todopoderosos y los "demás" (dentro de los cuales caerían, incluso, los grandes de Italia) es establecer una presencia mínima de jugadores del país correspondiente al club.
Veremos qué pasa.

2 comentarios:

Guido dijo...

Es muy interesante la solución que planteas. Los clubes deberían abrir los ojos y darse cuenta.

off topic: Me alegro que hayas conseguido las entradas. Ahora, a dar la vuelta!!

la pobla deportes dijo...

es flayte q no hayan jugadores de las canteras, los equipos si tuvieran como exigencia tener canteranos en el equipo, se preocuparian mucho más q si tan solo se restringiera a jugadores de la misma nacionalidad q la liga.

pd: de q vuelta están hablando?